12 mar 2014
Pantalla
Miras inocente la pantalla,
y veo cómo te remueves por dentro,
ese brillo en tus ojos,
y cómo te muerdes la lengua...
esa lengua que siempre me parece que está lejos.
Te miro, pero tú no me ves.
No puedes apartar esos ojos que me evocan tantas cosas,
de aquello que, de rutinario, roza para mí la risa.
Ay... si tú supieras lo que podría hacerte...
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario